Arqueólogos españoles de la Universidad Jaume I de Castelló han descubierto una villa romana en el este del país cuya finalidad era la viticultura. Los investigadores hallaron estructuras para la producción de vino (cella vinaria) y parcelas agrícolas para la viticultura (fundus) en el yacimiento arqueológico de Sant Gregori, en Burriana.
Aunque los arqueólogos aún no han podido identificar ninguna sala de prensado de vino (torculares), el yacimiento sí contiene zonas de almacenamiento y habitaciones contiguas que podrían haber servido como zonas de trabajo y vivienda. Los edificios están aislados y orientados de este a oeste para protegerlos de la humedad del norte y el calor del sur.
Sorprendentes para los arqueólogos fueron las zanjas de plantación de viñas encontradas, que los romanos llamaban "sulcus". Se trata de una técnica descrita también por autores antiguos como Columela y Plinio. Los arqueólogos documentaron diez zanjas paralelas en excelente estado de conservación, alineadas de noreste a suroeste. Estas zanjas, de entre 1,1 y 1,3 metros de ancho y separadas entre sí de 2,5 a 3 metros, proporcionaban espacio para varias viñas. Hallazgos similares son raros en España y sólo se han documentado en lugares como la costa gallega, Badajoz y Cádiz.
Cabe destacar que los viñedos se encuentran en una zona abierta, soleada y pantanosa. Sin embargo, los textos antiguos demuestran que los romanos supieron aprovechar las zonas húmedas para la viticultura mediante sofisticados sistemas de drenaje. También lo hicieron en las Marismas Pontinas, al sureste de Roma.
Las excavaciones están siendo coordinadas por el Programa de Cooperación Arqueológica del Mediterráneo en colaboración con el Museo Arqueológico de Burriana. Debido a la importancia de los hallazgos, el municipio de Burriana y el museo están trabajando actualmente para que el yacimiento sea accesible a los visitantes.
(ru / Eurekalert)