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El año pasado se produjeron en Alemania 8,94 millones de hectolitros de vino y mosto. Según la Oficina Federal de Estadística (Destatis), la producción fue así un 6% o 491.800 hectolitros superior a la de 2021. En comparación con la media de los años 2016 a 2021, se produjo un 3,5% más de vino y mosto (+ 304.600 hectolitros). Dos tercios (66%) de los vinos producidos en 2022 fueron vinos blancos, un tercio (34%) vinos tintos, incluidos el vino rosado y el Rotling. Si se convierte la cantidad en botellas de 0,75 litros, en 2022 se embotellaron unos 1.200 millones de botellas.
La proporción de vinos Prädikat fue del 21% (1,9 millones de hectolitros). Esta cuota fue significativamente superior a la de 2021, cuando sólo 15% del volumen producido pudo convertirse en Prädikatswein. Además, se produjeron 6,72 millones de hectolitros de vino de calidad (75 %) y 316.100 hectolitros de vino de calidad o Landwein (4 %).
Las dos mayores regiones vitivinícolas, Rheinhessen y Pfalz, produjeron algo menos de la mitad del volumen de vino de Alemania en 2022. En Rheinhessen fueron 2,44 millones de hectolitros, en el Pfalz 1,79 millones. Le sigue la región vinícola de Baden, con 1,37 millones de hectolitros, por delante de la región vinícola del Mosela, con 1,28 millones de hectolitros.
La campaña vitícola de 2022 se caracterizó por una larga sequía estival. La falta de precipitaciones afectó especialmente a las vides jóvenes o a los viñedos con poca capacidad de almacenamiento de agua. En los casos en que no fue posible el riego, la cosecha fue notablemente menor. Las viñas más viejas tuvieron menos problemas debido a sus profundas raíces. El verano seco redujo la infestación de hongos, lo que tuvo un efecto positivo en la salud de las uvas. Tampoco hubo heladas tardías ni tormentas como granizo en 2022. Las precipitaciones registradas poco antes de la vendimia permitieron obtener unos rendimientos superiores a los previstos.
(ru / Fuente: Destatis)