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Las continuas lluvias han provocado una infestación de oídio tan grave en la región de Champagne que incluso partes de la cosecha están en peligro. Desde principios de junio, las condiciones de humedad ya han favorecido la propagación del hongo, y los últimos tres días de lluvia continua han provocado su verdadera explosión. Como los viñedos apenas son transitables en este momento, es casi imposible luchar contra ellos. Es posible que los viticultores y los negociantes ya no cosechen algunos de ellos. Los rendimientos de los viticultores ecológicos, que ya han fumigado hasta 16 veces, están especialmente en peligro. También se han producido pequeñas inundaciones. La situación se describe como "sin precedentes" y peor que la de 1997 y 2016, también dos cosechas con infestaciones de moho extremadamente fuertes.
(al / Fuente: vitisphere; Foto: Christoph Hoyer)