El presidente ruso Vladimir Putin ha promulgado una nueva ley para la clasificación de los vinos espumosos. Sólo permite la denominación "champán" para los vinos espumosos rusos. El original francés, sin embargo, debe llamarse y venderse como "vino espumoso". Las primeras reacciones a la decisión no se hicieron esperar: el fabricante de champán Moët Hennessy, que, al igual que Moët Chandon, Veuve Clicquot y Dom Perignon, pertenece al grupo de lujo francés LVMH, ya anunció que detendría sus entregas hasta encontrar una solución. Todavía no se sabe si otros productores de champán renunciarán a sus exportaciones a Rusia por la disputa del nombre.
(ru / fuente: Spiegel; foto: pixabay)