El Instituto del Vino de Múnich ha estado ofreciendo durante diez años formaciones y capacitaciones certificadas para amantes del vino, profesionales del vino y sommeliers. El aniversario de la empresa es la ocasión para una entrevista con los fundadores.
El Instituto del Vino de Múnich es socio certificado del "Wine & Spirit Education Trust" (WSET), la mayor escuela de vinos del mundo, y ofrece cursos de vino profesionales para la formación y actualización dirigida a profesionales y amantes del vino. La empresa fue fundada por los dos expertos Bernhard Meßmer y Stefan Metzner y celebra este año su décimo aniversario.
¿Qué representa exactamente el Instituto del Vino de Múnich?
Stefan: El Instituto del Vino de Múnich representa, ante todo, un conocimiento profesional e independiente sobre el vino. Aquí se puede sumergirse profundamente en el mundo del vino y obtener conocimientos actualizados. Se aprende, entre otras cosas, a describir y evaluar vinos, a manejar el vino con más confianza y a distinguir, por ejemplo, vinos cotidianos de verdaderos grandes vinos.
En el centro de nuestra oferta están los cursos del Wine & Spirit Education Trust en Londres, abreviado WSET. Esta es, con diferencia, la mayor escuela de vinos del mundo, que colabora con socios certificados, como nosotros. El WSET ofrece un sistema de formación de cinco niveles, de los cuales nosotros impartimos los tres primeros aquí en Múnich.
Bernhard: Y hemos desarrollado nuestros propios cursos para profundizar aún más. En nuestras Masterclasses nos ocupamos de manera exhaustiva del champán, Borgoña, Burdeos, Italia, Alemania y Austria. Es importante para nosotros que todos nuestros cursos, ya sean WSET o Masterclasses, los impartamos de manera independiente. Por un lado, tenemos el profundo conocimiento y la formación del WSET, y por otro lado, simplemente es increíblemente divertido trabajar durante el día, en un ambiente perfecto, con personas que realmente tienen ganas de vino.
Stefan Metzner
Annette Sandner¿Qué enseñan en los cursos WSET?
Stefan: Con el Instituto del Vino de Múnich ofrecemos los primeros tres niveles de la formación en vino WSET. El WSET Nivel 1 es una introducción básica al tema del vino y se extiende por un día, al final del cual hay un pequeño examen y un certificado. El curso WSET Nivel 2 se basa en esto, pero también se puede asistir directamente, sin haber realizado previamente el curso de Nivel 1. En tres días se trata de las variedades de uva más importantes de las naciones vitivinícolas más relevantes de todo el mundo. También aquí hay un examen y un certificado, que es reconocido internacionalmente y muestra que uno se ha ocupado seriamente del vino. El WSET Nivel 3 dura cinco días y proporciona conocimientos detallados sobre regiones, viticultura, variedades de uva y estilos de vinos en todo el mundo. En los tres cursos se degustan muchos vinos de alta calidad juntos. Los describimos en detalle y los participantes también reciben comentarios personales sobre sus evaluaciones.
¿Para quién están destinados los cursos?
Bernhard: En primer lugar, los cursos están destinados a la gastronomía y el comercio. Pueden ser principiantes en restaurantes y tiendas de vino, pero también empleados establecidos que desean formarse. Sin embargo, más de la mitad de nuestros participantes son amantes del vino sin antecedentes profesionales, que quieren saberlo todo. Nuestros estudiantes provienen de toda Alemania, así como de Austria y Suiza.
Bernhard Meßmer
Annette Sandner¿Qué distingue a sus propias Masterclasses?
Bernhard: Ya llevamos varios años realizando el curso de dos días y realmente completo "Expertos en Champán y Vinos Espumosos".
Stefan: Además, hay Masterclasses de un día completo sobre Borgoña, Burdeos, los mejores vinos de Italia y los grandiosos vinos de Alemania y Austria, en las que transmitimos mucho conocimiento detallado y degustamos vinos de alta gama. Siempre hay grandes rarezas entre ellos.
Ahora se dedican profesionalmente al vino. ¿Qué hay de sus vinos favoritos personales?
Bernhard: Me gusta todo lo que es fresco. Así que Riesling, Chardonnay de regiones frías, Chenin Blanc del Loira, etc. Pero mi gran amor son los vinos espumosos, y en particular el champán de productor, porque pueden ser grandes vinos que no tienen nada que envidiar a los mejores blancos y tintos del mundo.
Stefan: Hay muchísimos vinos increíbles. Siempre me atraen los clásicos. También los vinos fortificados, que parecen estar cayendo en el olvido. Después de más de 30 años en el mundo del vino, siempre hay grandes cosechas que también redescubro. ¡Eso hace que la profesión sea tan variada y emocionante!
