|
|
La feroz disputa entre las casas de champán y los viticultores sobre la cantidad de la cosecha ha terminado. Tras largas negociaciones, las asociaciones acordaron una cosecha de 8.000 kg de uva por hectárea. Esta cantidad se traduce en unos 230 millones de botellas. Se trata de más de un 25 por ciento menos que en 2018, cuando se recogieron 10.800 kilos de uva por hectárea. En 2019, fue de 10.200 kg.
Al principio, las casas de champán querían incluso llevarse sólo de 6.000 a 7.000 kg por hectárea debido a la caída de las ventas provocada por la crisis de Corona. En consecuencia, los representantes de los viticultores han roto las conversaciones. La cosecha ya ha comenzado el 17 de agosto, dos semanas antes de la media a largo plazo.
(uka / Foto: Comité Champagne)