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El vino sin alcohol, el vino espumoso, la cerveza, la sidra y destilados, incluidas sus variantes de alcohol reducido, aumentarán masivamente sus ventas mundiales en los próximos años. Esta tendencia ha sido determinada por el instituto de investigación de mercados IWSR de Londres, especializado en bebidas alcohólicas, en un estudio global. En el estudio, los analistas prevén que el consumo anual aumente un tercio de aquí a 2026, superando con creces las tasas de crecimiento anteriores.
Las nuevas cifras de IWSR muestran la velocidad a la que crecen actualmente: la cerveza y la sidra, el vino, el vino espumoso destilados y las bebidas RTD con poco o nada de alcohol representarán más de 11.000 millones de dólares en los diez mercados más importantes del mundo en 2022. El volumen vendido ha aumentado un 7% en comparación con 2021. Aquí, Alemania es -como lo ha sido durante años- el mayor mercado mundial de vinos sin alcohol, cervezas, vinos espumosos y destilados. Le siguen Japón, España y Estados Unidos.
El IWSR espera que el crecimiento se acelere aún más. Según el IWSR, los volúmenes alcanzarán un aumento del siete por ciento a nivel mundial entre 2022 y 2026, frente al cinco por ciento en el período 2018-2022, siendo las bebidas sin alcohol el principal motor de la tendencia, con más del 90 por ciento de las ventas. El vino de alcohol reducido y el vino espumoso apenas desempeñan un papel en la actualidad.
A pesar del rápido repunte, el vino sin alcohol y el vino espumoso, así como la cerveza y destilados, representan actualmente solo el dos por ciento del total de las ventas mundiales de bebidas alcohólicas. Pero las tasas de crecimiento son notables: según el IWSR, las ventas en el Reino Unido, por ejemplo, han aumentado casi un 58% desde 2019.
(uka / Fuente: drinksbusiness; Foto: 123rf.com)