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La vendimia, iniciada este año en la segunda quincena de septiembre, ha llegado a su fin tras unas buenas cuatro semanas. El rápido avance de la maduración, el desarrollo compacto de las estructuras de la uva y la previsión de un tiempo inestable hicieron que, incluso en las regiones con un perfil varietal de maduración tardía, la vendimia fuera continua.

Las cantidades cosechadas volvieron a ser inferiores a las previstas al principio de la cosecha. Según el Instituto Alemán del Vino (DWI), la estimación actual de la cosecha de mosto de vino a nivel nacional es de 8,4 millones de hectolitros. La previsión era de 8,6 millones de hectolitros. Esta cantidad es un 19% inferior a la del año anterior en el año 2018, de excepcional rendimiento, y alrededor de un 4% por debajo de la media de diez años de 8,8 millones de hectolitros.

Debido a la sequía y al calor extremo durante el periodo de vegetación, pero también a los daños por quemaduras de sol en las uvas, así como a los periodos de heladas y granizadas limitados a nivel regional, se pudo llegar pronto a conclusiones sobre un menor volumen de cosecha. Sin embargo, existen grandes diferencias de rendimiento entre las 13 regiones vitícolas alemanas, así como dentro de cada una de ellas.

En las tres mayores regiones vitivinícolas alemanas, Rheinhessen, Pfalz y Baden, los nuevos valores previstos de menos 3 a menos 1 por ciento fluctúan sólo ligeramente en torno al valor medio de diez años. Con un descenso del 22%, la caída de los rendimientos en Franconia debido a las quemaduras del sol, el estrés de la sequía, las tormentas de granizo y las heladas tardías fue mayor de lo esperado; los productores de la región productora de Saale-Unstrut también tuvieron que aceptar un importante descenso de los rendimientos de menos 19% debido a los importantes daños de la sequía. Los productores de vino de la región del Ahr estiman que la pérdida con respecto al año anterior es de aproximadamente un tercio, lo que corresponde a una pérdida del 15% con respecto a la media de 10 años. Los productores de Sajonia, en cambio, pueden estar contentos con un aumento previsto del 6% respecto al año anterior.

(uka / Foto: Instituto Alemán del Vino)

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