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Los consumidores de vino de Alemania ni siquiera conocen las marcas y bodegas más conocidas. Este es el resultado de la actual y representativa encuesta "Atlas del Vino 2018" del instituto de investigación de mercados Splendid Research. Se encuestaron veinte nombres conocidos. Además, el instituto preguntó online en junio de 2018 a 1.007 personas de entre 18 y 69 años cuánto les gusta beber vino y con qué frecuencia, y qué grados de dulzor y variedades de uva les gustan. También se planteó la cuestión de dónde compran los clientes el vino y cuánto dinero pagan de media por una botella.

Según la encuesta, alrededor de dos tercios de los alemanes bebieron vino cuatro días en las últimas cuatro semanas, lo que significa que levantaron la copa una vez a la semana. Las marcas de supermercado Blanchet, Käfer y Rothschild son las tres más conocidas. El 14% de los consumidores de vino, por el contrario, no conocía ninguno de los veinte nombres preguntados en el estudio. Por término medio, los que dicen que les gusta o incluso les gusta mucho beber vino sólo conocen tres o cuatro marcas y fincas, desde Blanchet a Gallo y desde Käfer a Rothschild.

Según Splendid Research, los ciudadanos alemanes gastan una media de 8,18 euros en una botella de vino. Por cierto, el 76% de los clientes lo compran en el supermercado. El 24% opta por el comercio clásico de vinos, y el 17% de los compradores acude directamente al viticultor. En cuanto al envase, los consumidores de vino también son mayoritariamente tradicionales: el 80% opta por la botella de vidrio con corcho natural. El tapón de rosca ocupa el segundo lugar: el 51% opta por él. Los tetrapacks con tapón de rosca son bastante impopulares: sólo los eligen el 6% de los clientes.

Según el estudio, el tipo de vino más popular es el tinto, con un 61%, seguido del blanco, con un 53%. El vino rosado ocupa el tercer lugar: al 41% de los consumidores de vino les gusta darse un capricho.

En lo que respecta a las variedades de uva, los consumidores de vino alemanes tienen una favorita, según Splendid Research: el 51% afirma que le gusta beber Riesling. El Merlot ocupa el segundo lugar, con un 36%. El Pinot Noir ocupa el tercer lugar. El Nero d'Avola y el Barolo, por el contrario, se encuentran entre las variedades que ocupan los últimos puestos de la clasificación. Casi ninguno de los encuestados los describe como "deliciosos".

(uka / Foto: Instituto Alemán del Vino)

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