Hace unos días, un viticultor de la región del Var, en el sur de Francia, fue tiroteado mientras esparcía fitosanitarios en el viñedo por la noche. Dos balas alcanzaron el tanque con agente pulverizador, que estaba acoplado al tractor, informan los medios de comunicación franceses. El hombre no resultó herido. Dijo a la policía que había oído los disparos pero que no los atribuía a un ataque. Sólo después de su regreso descubrió los agujeros de bala en el tanque porque el pesticida se había filtrado. El viticultor está en shock, dijo.
Según los medios de comunicación locales, las investigaciones policiales han demostrado que los disparos se efectuaron a una distancia de unos 30 metros. En la actualidad es habitual que te filmen o te insulten cuando aplicas los plaguicidas, subrayó el viticultor, pero nunca antes les habían disparado allí.
(uka)