El mercado secundario de vinos selectos sigue demostrando ser una inversión mejor que el oro y las acciones. Mientras que las bolsas internacionales se han desplomado en 2022, los precios de los vinos finos han seguido su tendencia al alza. Su rentabilidad es actualmente muy superior a la del oro y a la de la mayoría de los principales índices bursátiles, como el S&P 500 (EE.UU.) y el FTSE 100 (Reino Unido).
Según datos de la empresa de inversiones Cult Wines, con sede en Londres, el valor de los vinos finos aumentó más de un 20% el año pasado. En el informe anual de 2022, vinos de alta gama superó con creces a los activos financieros tradicionales. Como resultado, se mostraron "relativamente inmunes a un entorno macroeconómico volátil". En consecuencia, se espera que en 2023 los inversores sigan buscando activos tangibles, como los vinos de gama alta, y que la inflación en muchos países se mantenga en su nivel más alto en varias décadas. Los Borgoñas registraron las mayores ganancias en este sentido en 2022, con un aumento del 31,31% en el Índice Cult Wines Borgoña a lo largo del año, seguidos de los Champagnes, que subieron un 19,35%.
(ru / Fuente: Drinks Business; Foto: 123rf.com)