La historia de las Bodegas Tradicionales Austriacas se remonta a 1990. En esa época, un pequeño círculo de viticultores comenzó a discutir la identidad del vino en relación con su origen.
Con la fundación de la Asociación de "Fincas Vitivinícolas Tradicionales Austriacas" en 1992, se creó una asociación que sigue defendiendo esta idea de origen hasta el día de hoy. En una investigación a largo plazo, se han investigado y se siguen investigando las influencias de los distintos factores de un viñedo, como el tipo de suelo, el microclima, la exposición, la altitud y muchos más, para luego seguir la cuestión de cómo afectan estos factores a las distintas variedades de uva y, por tanto, también al carácter y la calidad del vino. El objetivo de la asociación era y es clasificar los lugares de viñedos más destacados de la región del Danubio.