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La fuerte demanda de champán podría provocar escasez hacia finales de año. Debido a los cierres en la pandemia de Corona y a los aranceles de Trump, la demanda bajó considerablemente en 2020. Como consecuencia, el Comité Champagne ha limitado mucho el rendimiento de la cosecha de 2020 y muchas casas de Champagne han decidido reducir el número de botellas que embotellan. Además, varias añadas seguidas de gran calidad han hecho que se retenga más vino para comercializarlo como vino de añada, dejando menos disponibilidad para el champán normal sin añada. Con muchos mercados, especialmente Estados Unidos y el Reino Unido, que están experimentando un crecimiento mayor de lo esperado tras el fin de los aranceles punitivos y las restricciones a los restaurantes, la oferta se ve ahora limitada. Los compradores podrían notar los efectos en la época navideña, cuando se anulan las ofertas especiales habituales.
(al / Fuente: drinksbusiness; Foto: pixabay)