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La denominación siciliana Etna DOC ha solicitado oficialmente el estatus de DOCG del más alto nivel de calidad. Así lo ha anunciado el Consorzio Tutela Vini Etna DOC. También se prevén nuevas normas de producción. Por ejemplo, la variedad blanca Carricante se añadirá a la variedad Nerello Mascalese ya incluida en el pliego de condiciones. Los productores también tendrán la opción de producir un Pas Dosé con denominación de origen.
Otros cambios previstos son la reducción de los rendimientos por hectárea para la producción de vinos monovarietales Etna Rosso procedentes de una de las 133 contrade (unidades geográficas). Además, se permitirá a los viticultores indicar en la etiqueta el nombre de uno de los 20 municipios si las uvas proceden exclusivamente de esta zona.
"Se trata de una decisión histórica para toda la región del Etna", declaró Francesco Cambria, presidente del consorcio. "Somos una denominación próspera que tiene mucho interés en defender la especificidad de nuestra viticultura: Nuestro patrimonio de variedades de uva autóctonas cultivadas en el volcán activo más alto de Europa".
Fundada en 1968, la DOC Etna es la DOC más antigua de Sicilia y también una de las más antiguas de Italia. La denominación es conocida por su ecosistema único y por sus vinos de terruño elaborados con las variedades autóctonas Nerello Mascalese, Nerello Cappuccio y Carricante. En los últimos 20 años, la superficie de viñedo y el número de productores del volcán no han dejado de aumentar. Según el consorcio, en 2022 había plantadas de vid unas 1.291 hectáreas. 442 bodegas llenan alrededor de 5,8 millones de botellas.
El proceso de reconocimiento de la DOCG implica varias fases de solicitudes y revisiones, que se espera que duren unos dos años. Etna sería la segunda DOCG de Sicilia tras Cerasuaolo di Vittoria.
(ru / Decanter)