La bodega Château Mukhrani le adentrará en un mundo lleno de elegancia, atención y tradición, y le mostrará una parte muy especial de la historia del vino georgiano. Una historia que es sinónimo de grandes vinos.La historia es un viaje al pasado que nos muestra dónde empezó todo. Nos muestra cómo todo está conectado. Se construye a partir de los demás. Conecta el antes con el ahora. La historia de la bodega georgiana Château Mukhrani es un maravilloso ejemplo de la habilidad con que se combinan estos dos mundos. Si nos remontamos al siglo XVI, veremos que las raíces de los príncipes de Mukhrani se encuentran en la dinastía Bagrationi, una de las familias nobles más antiguas del mundo. Sucedió que en 1512 el rey David de Kartli cedió la hacienda Mukhrani a su hermano Bagrat. Exactamente 300 años después, Ivane Mukhranbatoni nació en el seno de esta familia. De joven, se decidió inicialmente por la carrera militar. Con éxito: incluso fue nombrado gobernador militar de Georgia Occidental. Pero también se interesó por la agricultura. Durante un viaje a Francia, que le llevó a las famosas regiones vinícolas de Borgoña y Champaña, aprendió más sobre el arte de la elaboración del vino, y decidió poner en práctica sus nuevos conocimientos en la finca familiar. Era una elección obvia, ya que en el clima templado de Georgine, situada entre el Mar Negro y el Cáucaso, se cultivan desde hace milenios uvas de excepcional calidad. Ivane Mukhranbatoni añadió un capítulo asombroso a esta historia con la primera cosecha en 1878. Desde entonces, es sinónimo de vinos de la más alta calidad.
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A día de hoy, la fuerza de la bodega Château Mukhrani reside en el orgullo que siente por sus propios recursos. Vinos que en su día alcanzaron fama mundial en muy poco tiempo e incluso llevaron a Château Mukhrani al palacio del Zar en Rusia, en la lista de proveedores exclusivos de la corte. Estos capítulos de finales del siglo XIX y principios del XX son sinónimo de gran fama y excelencia, y en Château Mukhrani no se han quedado en el pasado. Este orgullo se manifiesta sobre todo en el compromiso con su propio patrimonio: en las 102 hectáreas de suelos fértiles que componen la bodega y que se cultivan de forma ecológica, maduran variedades de uva predominantemente autóctonas, como las blancas Goruli Mtsvane y Rkatsiteli, así como las tintas Saperavi y Tavkveri, variedades de uva raras de Kartlian que Château Mukhrani ha devuelto a la vida. El orgullo también se manifiesta en la conciencia de la alta calidad, que hay que seguir cumpliendo. Así, el trabajo en el viñedo es consciente y cercano a la naturaleza, y las uvas se vendimian con suavidad. "Nuestros viñedos son la clave para que nuestros vinos sean exquisitos y únicos", asegura el enólogo jefe Patrick Honnef. Con esta idea en mente, Château Mukhrani combina la viticultura tradicional con una bodega contemporánea y tecnología moderna.
El círculo parece haberse cerrado, porque Patrick Honnef, como Ivane Mukhranbatoni en su día, también aprendió su oficio en Francia, aunque en Burdeos. Quizá sea este paralelismo lo que le permite crear vinos equilibrados, llenos de elegancia e intensidad. Quizás sea también la conciencia de esa misma historia y del esplendor de antaño lo que siguen viviendo los apasionados propietarios actuales del Château Mukhrani. Su empeño es crear vinos inimitables y expresivos. Vinos con un gran potencial de envejecimiento. Vinos que, en cierto modo, son reales.
Le invitamos cordialmente a degustar esta gran bodega y el Saperavi Supérieur 2018 en nuestra cata online en alemán wein.plus:club 'Grillweine - weiß oder rot?' en julio de 2023. Las plazas disponibles para profesionales del vino y aficionados particulares son muy limitadas.
También puede encargar este vino en las tiendas en línea que figuran en wein.plus:find+buy.