No hay diario, revista o publicación especializada que no se haya hecho eco del tema de la abstinencia alcohólica en los primeros días de enero. Está claro que después de las fiestas, mucha gente quiere bajar el ritmo, cuidar el hígado, tranquilizar la conciencia. Pero cada vez hay más gente que no sólo se abstiene del alcohol durante el "enero seco". No, el llamado "Mindful drinking", la nueva sobriedad, se ha convertido para muchos en un estilo de vida autoproclamado.
"El creciente interés por el Dry January es una expresión del hecho de que el cool sober drinking, es decir, el disfrute consciente sin alcohol, se está convirtiendo cada vez más en un tema de interés para muchos consumidores", confirma Cathrin Duppel, Directora de Marketing de Rotkäppchen-Mumm. Según el Panel de Hogares 2021 de GfK, las bebidas sin alcohol o desalcoholizadas suelen ser la primera opción, especialmente en el grupo de edad de menos de 40 años. Y a más tardar cuando el primitivo favorito de los alemanes, el "Doppio Passo", salió al mercado en versión "sin alcohol" el verano pasado, quedó claro: ya no es posible imaginar las estanterías de los supermercados sin vinos desalcoholizados.