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La asociación de comercialización de Burdeos, CIVB, ha decidido por unanimidad disponer de una reserva de botellas almacenadas por las bodegas. El objetivo es reducir las existencias de vino tinto de Burdeos y Bordeaux Supérieur en oferta y evitar así que la cantidad siga creciendo. Bernard Farges, presidente de la CIVB, dijo que había que reajustar el equilibrio entre la oferta y la demanda. Actualmente, dijo, hay una falta de equilibrio entre los volúmenes de cosecha adoptados y la demanda.
Durante la temporada de ventas 2019-2020, el volumen de Burdeos almacenado alcanzaría los 2,2 millones de hectolitros. Esto supone un aumento del 21% en sólo un año. En el caso de Bordeaux Supérieur, el volumen es de unos 1,05 millones de hectolitros, lo que supone un aumento del 14%. Dado que la tendencia apunta a un aumento de las existencias, hay que encontrar ya una normativa para su reducción.
(uka / Foto: Wikipedia - Cyril5555)