En la noche del lunes 11 de enero de 2021, los viticultores alemanes pudieron introducir uvas congeladas a hasta diez grados bajo cero para la producción de vino de hielo. Así lo informa el Instituto Alemán del Vino (DWI). Entre ellos, están el Fellbacher Weingärtner de Württemberg, que pudo cosechar uvas Riesling y Spätburgunder con más de 160 grados Oechsle cada una, el Bergsträßer Winzer de la Hessische Bergstrasse y la finca vinícola Theisen en el Mosela, que aportaron uvas para vino de hielo de la variedad Souvignier gris, resistente a los hongos.
Antes, en la clara noche de luna llena del 30 de noviembre, las regiones vitivinícolas del Nahe, el Mosela, en Rheinhessen, en el Palatinado, en Franconia o en el Rheingau, algunos viticultores habían cosechado con éxito uvas de vino congeladas a temperaturas gélidas.
Según la DWI, esta precocidad en la cosecha de vino de hielo es muy favorable para la calidad del vino, ya que las uvas para la producción de vino de hielo deben estar lo más sanas posible.
(uka / Foto: Instituto Alemán del Vino)