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Por primera vez, los vinos blancos y rosados representan más de la mitad del consumo mundial. Así lo ha comunicado la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV). Se ha producido un cambio significativo en las preferencias de los amantes del vino desde el año 2000: el 43% de los vinos consumidos en 2021 eran blancos, lo que supone un aumento de tres puntos porcentuales desde principios de siglo. La proporción de vinos tintos descendió de algo más de la mitad al 47%. Desde el máximo alcanzado en 2007, el consumo de vino tinto ha descendido incluso en 15%. Sólo en Francia, antaño el mayor mercado de vino tinto del mundo, las ventas han caído casi a la mitad desde principios de siglo.
Según cifras de la OIV, el consumo mundial de vino blanco y rosado aumentó un 10% y un 17% respectivamente en el mismo periodo. El auge de los vinos espumosos en Estados Unidos, Alemania y Reino Unido, en particular, ha seguido impulsando este crecimiento desde 2010. Las ventas en estos países están compensando el descenso en países tradicionalmente vinícolas como Francia y España. En estos países, las ventas de vino cayeron significativamente en general.
Según las cifras, EE.UU. es el país con mayor consumo de vino blanco del mundo, con un aumento del 65% entre 2000 y 2021. Los vinos blancos también aumentaron en Rusia, Australia y Reino Unido, mientras que el consumo en Italia, el segundo mercado mundial de vino blanco, se mantuvo estable. Francia es el mayor mercado de ventas de vinos rosados, con un tercio del consumo mundial, mientras que el rosado creció más rápidamente en el Reino Unido. La mayor parte del vino tinto se consume en EE.UU., China y Alemania, mientras que EE.UU. y China han crecido desde 2000.
(al / Fuente: decanter)