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La asociación de productores de vino ecológico Ecovin ha presentado su informe de la cosecha de 2020. Según Ecovin, las cosechas de los productores de vino ecológico están por debajo de la media a largo plazo. En Sajonia y partes de Franconia, las cosechas fueron especialmente escasas. Las razones fueron el tercer verano seco consecutivo, las heladas tardías de mayo y los daños aislados del granizo poco antes de la cosecha. Sin embargo, la calidad era muy buena debido a la buena maduración de la uva.
El año vitivinícola ecológico 2020 comenzó en primavera con una brotación temprana y temperaturas veraniegas en abril. Durante los santos hielos de mayo, algunas zonas de cultivo resultaron dañadas por las heladas tardías, que causaron pérdidas masivas de rendimiento en algunos lugares. Las temperaturas también fueron frescas en la época de floración. La floración fue muy lenta, por lo que las bayas se desarrollaron de forma diferente dentro de un racimo. Durante el verano, el tiempo se caracterizó por el mucho sol hasta septiembre. "La humedad invernal no fue suficiente para mantener las reservas de agua en el suelo durante todo el verano. Hubo que regar los viñedos especialmente afectados y los campos jóvenes", informa Anne Meyer, asesora técnica de Ecovin.
"Por un lado, las altas temperaturas son buenas para la maduración de la uva. Por otro lado, se produjeron daños por quemaduras de sol y se favoreció la propagación del oídio. Así que los viticultores tenían que estar atentos", añade Andreas Hattemer, presidente de Ecovin. Sobre todo los viticultores ecológicos de Würrtemberg tuvieron problemas: La zona de cultivo se vio especialmente afectada por las fuertes heladas tardías. En algunos viñedos, todos los brotes se congelaron, por lo que no se pudo cosechar ninguna uva. Además, cayó granizo durante la temporada de cultivo, y también se encontró la mosca del vinagre de las cerezas. Esto provocó pérdidas masivas para los viticultores ecológicos.
(uka / Foto: Instituto Alemán del Vino)