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En el nuevo documental francés "Un Point C'est Tout!" ("¡Un punto es todo!") ("¡Eso es todo!"), de Pierre-Paul Guidicelli, la viverista Lilian Bérillon habla con viticultores de renombre sobre el incierto futuro de la viticultura. Personalidades del mundo del vino como Anselme Selosse, Jean-Louis Chave, Peter Sisseck y Lalou Bize-Leroy hablan de los grandes retos a los que se enfrentan.
La situación de partida es alarmante, ya que muchos viñedos de renombre se ven amenazados por un lento declive: la esperanza de vida de las vides desciende drásticamente. Según Bérillon, la culpa no es únicamente del calentamiento global, sino de la falta de diversidad de las vides. El material de plantación se produce industrialmente y no es adaptable, lo que muchos viticultores aún no tienen suficientemente en cuenta.
Los viticultores que aparecen en la película coinciden en que la viticultura ha tomado un rumbo equivocado y que se necesitan cambios urgentes. Según Jean-Louis Chave, "aún hay esperanza", pero el tiempo apremia, ya que cada año mueren prematuramente más cepas jóvenes. Es "un verdadero desastre" si se tiene en cuenta que los grandes vinos proceden de cepas "que tienen al menos 40 años", recuerda Lalou Bize-Leroy.
"Con este documental quería abrir el debate y arrojar luz sobre el funcionamiento de todo el sector vitivinícola. Tiene que replantearse seriamente su enfoque. Quería tomar partido y dar la palabra a las bodegas y a las casas de champán con las que trabajo desde hace muchos años", explica Lilian Bérillon.
Pero la película también debe dar esperanza y mostrar las soluciones que se han encontrado hasta ahora. Sin duda hay perspectivas para las generaciones futuras, afirma Bérillon.
El documental puede verse en francés con subtítulos en inglés.
(ru / Winenews)