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Este año, la floración de las vides ha comenzado en todas las regiones vinícolas alemanas entre ocho y diez días más tarde que la media a largo plazo. Debido a las óptimas condiciones climatológicas, la floración se está produciendo muy rápidamente y "ya ha terminado en los lugares cálidos, así como en las variedades de uva de floración temprana", informa el Instituto Alemán del Vino (DWI).
Dado que la experiencia demuestra que las uvas están listas para ser cosechadas entre 90 y 100 días después de la floración, se espera que la cosecha principal de la añada 2021 comience a mediados de septiembre. Sin embargo, las primeras uvas tempranas para la elaboración de Federweißen podrían "cosecharse sin duda ya a finales de agosto", escribe la DWI.
Con las temperaturas cálidas de las últimas semanas, el crecimiento de las vides "literalmente explotó después de la primavera comparativamente fresca y húmeda". En algunos casos, los brotes habían crecido hasta 30 cm en una semana. Para los viticultores, esto significa mucho trabajo en los viñedos: ahora hay que atar las vides rápidamente para que el viento no las rompa.
(uka / Foto: Instituto Alemán del Vino)