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En el municipio portugués de Fundão, los servicios de control ya detectaron el 25 de marzo la Xylella fastidiosa en una vid de 20 años. Es la primera vez que la bacteria se encuentra en una vid en Europa continental. En 2016, ya se habían descubierto vides infectadas en la isla española de Mallorca.
El patógeno Xylella fastidiosa es la bacteria conocida también por destruir olivos en el sur de Apulia. Sin embargo, la vid infectada en Portugal es una subespecie diferente, Xylella fastidiosa fastidiosa ST1, responsable de la enfermedad de la vid de Pierce. No es idéntica a la cepa bacteriana Xylella fastidiosa pauca ST53, que destruye hectáreas de olivos en Salento (Italia).
El hallazgo en Portugal está causando gran preocupación entre los cultivadores y los servicios fitopatológicos de toda Europa. Actualmente, la Xylella es uno de los diez organismos de cuarentena con mayor riesgo. La enfermedad de Pierce, que lleva varios años causando graves pérdidas en los viñedos californianos, se manifiesta inicialmente por el amarilleamiento de las hojas, que en el curso de la enfermedad puede conducir a la muerte de sarmientos enteros, así como de la vid. Se transmite a través de cigarras. Se transmite a través de las cigarras. Por lo general, las plantas infectadas no sobreviven más de uno o dos años.
La Xylella fastidiosa subsp. fastidiosa, como la mayoría de las enfermedades bacterianas, es incurable. La única forma de contener su propagación es mediante la vigilancia, la demarcación de zonas, la erradicación mediante la destrucción de las plantas infectadas y el control de los insectos vectores.
(ru / fuente: Mille Vigne)