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La viticultura de Portugal está siendo azotada por varias crisis graves al mismo tiempo: los incendios forestales devastaron viñedos y bodegas en las regiones de Vinho Verde, Dão y Bairrada. En la región del Douro, muchos de los pequeños viticultores podrían no cosechar las uvas este año y cerrar sus negocios por completo. Muchos no tienen sucesores para sus bodegas que ahora son no rentables. Los precios de las uvas son insosteniblemente bajos, la mano de obra escasa y las inversiones necesarias en viñedos, como las replantaciones, son inasequibles para muchos.
Las ventas de vino de Oporto han disminuido un 13 por ciento entre 2021 y 2023. También la cantidad de mosto (“Beneficio”) que se puede utilizar legalmente para la producción de vino de Oporto ha disminuido en un 22 por ciento desde 2022. Los viticultores exigen en un manifiesto que el Aguardente, es decir, el licor utilizado para fortalecer el vino de Oporto, debe provenir exclusivamente del Douro a partir de 2025. Actualmente, este se obtiene principalmente de España o Francia. Además, proponen la creación de dos Beneficios: uno para el vino de Oporto y otro para el vino de mesa Douro DOC. Actualmente, las uvas para el Beneficio del vino de Oporto valen de dos a tres veces más que las de vino de mesa. Este sistema subsidia la producción de vino de mesa económicamente inviable que se vende barato en los supermercados. Al mismo tiempo, socavaría la reputación del Douro como región vitivinícola de calidad. Ya hay rumores de que algunos productores están utilizando uvas baratas de España de manera ilegal para ahorrar costos.
La cosecha de 2024 en el Douro se estima de muy alta calidad. La añada podría ser declarada como Vintage-Port.
(al / Fuente: drinksbusiness)