La cosecha de 2023 en la región italiana de Abruzos está un 70% por debajo de la media. El motivo son las fuertes lluvias de abril y mayo, que provocaron una plaga masiva de mildiu. La pérdida corresponde a unos dos millones de hectolitros de vino -o 260 millones de botellas- por valor de hasta 380 millones de euros. Los representantes de las 15.000 empresas vitivinícolas, que cultivan unas 32.500 ha de viñedos, exigen ahora al gobierno central y regional un amplio paquete de ayudas. Por ejemplo, se compensará a las empresas, se suspenderá la devolución de préstamos y financiación durante dos años y se reducirán o suspenderán las cotizaciones a la Seguridad Social.
"Tras meses de anuncios, promesas y falsas expectativas, las fuerzas políticas y empresariales de la región de los Abruzos siguen sin dar respuestas claras para apoyar a sector del vino. Nos veremos obligados a tomar las calles", afirmaron los representantes del sector vitivinícola en una declaración conjunta. Hasta ahora, dijeron, sólo se han puesto a disposición unos cinco millones de euros.
(al / Fuente: Il sole 24 Ore )