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En su primer año de existencia, las tres Cités des vins de Bourgogne acogieron a 80.000 visitantes. La de Beaune atrajo a 65.000 personas, es decir, el 80% de los visitantes. Además de las exposiciones sobre el vino y la viticultura en Beaune, el emplazamiento de Chablis cuenta con un bar de vinos y el de Mâcon con varias salas de conferencias.
Como explica la responsable de cultura y comunicación de la Cité, Chloé Butet, el 80% de los visitantes proceden de Francia, la mitad de ellos de la región Borgoña-Franco Condado. De este modo se ha logrado el objetivo de anclar la Cité regionalmente. La mayoría de los visitantes extranjeros proceden de Bélgica, Alemania, Suiza y los Países Bajos.
Olivier Le Roy, Director General de la Cité des Climats et Vins de Bourgogne, explica que la experiencia de la visita ha sido positiva tanto para los "novatos como para los entendidos". "El primer grupo dice que la visita es muy informativa y accesible al mismo tiempo, mientras que el segundo suele quedar impresionado por poder aprender algo a pesar de sus conocimientos sobre el tema", afirmó. Le Roy destacó que muchas familias también acudían durante las vacaciones escolares y que tanto los niños como los adolescentes encontraban interesante la visita. En la planificación original antes de la pandemia, la ciudad de Beaune había previsto 150.000 visitantes al año.
(al / fuente: vitisphere)